Esta web utiliza cookies para obtener datos estadísticos de la navegación de sus usuarios. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso. Más información Cerrar

Mostrando entradas con la etiqueta medio ambiente. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta medio ambiente. Mostrar todas las entradas

Niños al aire libre

|

Los niños de hoy día no tienen muchas ocasiones de disfrutar de un entorno natural (sobretodo los que viven en las ciudades), como teníamos los de mi generación. Antes teníamos más libertad, jugábamos más en la calle y teníamos mucho más contacto con la naturaleza.

Es muy importante que los niños aprendan a conocer más de cerca el origen de la vida, que salgan regularmente al aire libre o al parque y no se centren tanto en los videojuegos y otros aparatos tecnológicos.

Hay informes que reconocen las ventajas que conlleva el hecho de estar en contacto permanente con el medio natural y una de ellas es la salud, ya que las personas están más sanas, se adaptan mejor y tienen más capacidad de concentrarse en admirar los espacios verdes, cosa que les proporciona tranquilidad y un aumento en la atención en el ámbito escolar, además de reducir el estrés.

Cada día la sociedad es más consciente de que debemos cuidar el planeta y hemos de contribuir para que el mundo sea cada vez más sostenible. Una manera de hacerlo es inculcando estos valores a nuestros hijos, enseñándoles a respetar el medio ambiente, a reducir el consumo innecesario y a valorar lo que nos brinda la naturaleza.

Se ha demostrado que cuando se acondicionan zonas verdes con árboles y huertos en las escuelas, el comportamiento y los resultados académicos son mejores.

El autor del libro “Last child in the Woods”, Richard Louv, sostiene que existen un grupo de dolencias modernas a las que ha denominado “Trastorno por déficit de naturaleza”. Entre este grupo de dolencias, están la ansiedad, hiperactividad, el estrés o la depresión y todo ello puede ser provocado por la falta de contacto con un entorno natural.

Intentemos hacer un esfuerzo por nuestros hijos y por nuestro planeta dándole la importancia necesaria al hecho de cuidar y preservar la Tierra, compartiendo con ellos las diversas riquezas naturales que nos ofrece.

Nuestra generación no necesitaba consolas ni artilugios para ser feliz.